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Rocío de madrugada de Primavera,
baile de aves celebrando la existencia,
nocturno de estrellas intermitentes.
Luciérnagas y grillos
entonan melodías
inconclusas.
Remembranzas de quimeras
y entretenimientos
de la niñez.
Silencios.
Entrega.
Calor protector.
Mami, ferviente apoyo de mi ser y no ser,
creadora de glorias, de mi vida
y artífice del título de mi octavo poemario.
Bautizaste desde el edén
Su título:
“Bellas Cosas”.
© Kellypocharaquel.
1 comentario:
Hola mi querida Raquel, recuerdo muy bien este poema de su Libro Bellas Cosas.
Una madre siempre marca en sus hijos bellas cosas, como este poema y tantos otros que he tenido el placer de leer.
Un gran abrazo amiga.
Sor. Cecilia
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